miércoles, 16 de noviembre de 2011

GESTIÓN DEPORTIVA PÚBLICA SOSTENIBLE

DE LA “GESTIÓN DEL CAMBIO” AL “CAMBIO DE GESTIÓN”  EN LOS CENTROS DEPORTIVOS PÚBLICOS.
En “la gestión del cambio” se hablaba mucho de calidad y poco de costes. Como decía en mi artículo anterior, hemos vivido unos tiempos de bonanza económica que han producido “excesos” en cuanto a la administración y gestión del heraldo público, en general y por ello, en el ámbito deportivo en particular, que es el que nos ocupa. No ha importado construir unos extraordinarios centros deportivos municipales difíciles de mantener, que en gran parte se encuentran infrautilizados, especialmente entre las 8 y 16 horas. Tampoco ha importado planificar actividades de dudosa competencia pública. El dinero con el que políticos y dirigentes deportivos “disparaban”, parecía que no era de “nadie”, que no tenía “dueño”, y por lo tanto, que era inacabable.
Con el advenimiento de la crisis que estamos padeciendo, no nos queda otro camino que reflexionar en base a un análisis de la situación anterior, tratando de diferenciar lo esencial de lo accesorio en cuanto a los pilares básicos de la actividad físico-deportiva para reconducir a través de “nuevos o viejos modelos” la directrices a seguir a partir de ahora, lo que nos lleva inexorablemente a un “Cambio de Gestión” que de forma resumida se apoyaría en las siguientes ideas y medidas:
1.- Como premisa inicial nuestros clientes o usuarios deben sufrir lo menos posible, las continuas modificaciones  a las que nos aboca la actual situación socioeconómica. Aunque se cambien algunos servicios y “merme” algo la calidad, no deben incrementarse los precios, al menos en los servicios “básicos”.
Estamos obligados a ajustar nuestros servicios y sus precios a las necesidades de los clientes o usuarios, para lo cual propongo las siguientes medidas:
·         Conocer el verdadero coste de cada servicio, haciendo una imputación total de lo que le corresponde.
·         Eliminar servicios o actividades que no sean meramente de promoción físico deportivas y  de competencia municipal. Entendiendo por actividades de competencia deportiva municipal al “Deporte para todos”
o   Escuelas deportivas infantiles y para jóvenes
o   Actividades físico deportivas para adultos y mayores; Mantenimiento físico; aerobic; natación; carrera y alguna otra actividad pero siempre con grupos numerosos.
o   Actividades para discapacitados, en colaboración con distintas entidades.
o   Juegos deportivos municipales.
o   Torneos y campañas de promoción deportiva en colaboración con las federaciones u otras organizaciones y patrocinados por entidades privadas.
o   Cesión de instalaciones a clubes y entidades deportivas sin instalaciones propias, a precios de coste.
o   Alquileres de instalaciones a precios de coste.
o   Utilización libre de instalaciones; piscinas; pistas de tenis, etc.
·         Incremento de ingresos con:
o   Precios de los servicios en base a costes (sin subvencionar), de todos los servicios que se puedan prestar en los centros deportivos ya construidos con determinados elementos, (jacuzzi; piscinas termales; saunas; baños turcos; etc.) o de otros servicios de actividades físicas insostenibles por el reducido número de alumnos/profesor que hay que tener.
o   Aumento del número de alumnos/profesor en las actividades dirigidas, en las que no necesariamente se reducirá la calidad del servicio, si se forma  y motiva adecuadamente a los técnicos.
2.- Para ello, será necesario:
·         Formación de los técnicos para una nueva realidad, en donde se requerirá una mayor participación e implicación de dichos técnicos.
·         Renegociación de los Convenios Colectivos,  en aras de optimizar el rendimiento de los trabajadores que sin mermar sus derechos laborales evite el uso, en ocasiones abusivo de los mismos, en detrimento de un correcto desempeño laboral. Revisión de Convenios en los que tendrán que revisar algunas “concesiones”, tales como número y forma de libranzas; días libres anuales; asistencia a consultas médicas; permisos personales; etc. Esto no es gratuito, no es porque sí, ya que obedece a que en el “Cambio de Gestión”, los nuevos dirigentes de centros deportivos públicos tendrán que elegir entre las condiciones mencionadas, o que la situación económica obligue a plantear una “Concesión o Gestión Concertada de los centros con empresas privadas, con el peligro de la eliminación de puestos de trabajo. 
·         Control del gasto, especialmente en energía, concienciando a empleados y usuarios de la necesidad de colaboración en este tema y en otros que sirvan para abaratar costes.
A pesar de los expuesto anteriormente, la realidad en bastantes municipios es que cuentan con “instalaciones de lujo” con el consiguiente dilema que esto implica ¿Continuar con ellas, pero poniendo precios en base a los costes? ¿Gestionarlas a través de una Concesión, con un pliego de condiciones técnicas y administrativas que deje claro el deseo del municipio de que se siga prestando servicio; no perder dinero y mantener a ser posible los ratios de calidad existentes hasta la fecha?

HACIA UN NUEVO MODELO DE CRECIMIENTO
 En función de la situación actual, opino que, la única forma de crecer de los ayuntamientos en la oferta de servicios e instalaciones es a través de contratos de concesión de obra y explotación de los servicios, en donde el Ayuntamiento debe:
·         Poner los terrenos en donde desea que se construya una instalación deportiva.
·         Marcar, a través de los pliegos de condiciones técnicas y administrativas:
o   Los servicios mínimos básicos que deberán ofrecerse. Actividades; horarios; etc.
o   Calidad mínima con la que se deberán prestar los servicios deportivos básicos municipales.
o   Los precios máximos en los servicios deportivos básicos.
o   Conservación y mantenimiento del Centro Deportivo y sus instalaciones, permanente.
o   Duración de la Concesión, no más de 40 años, finalizando con la reversión de todo el Centro Deportivo al Ayuntamiento.
o   Controles continuos de calidad y del cumplimiento de los pliegos.
o   Sanciones adecuadas a las faltas e incluso final de la concesión por incumplimientos.
Todo lo enunciado hasta ahora no es nuevo, ya se ha realizado y se sigue realizando en algunos municipios, pero si puede ser una novedad para una gran mayoría de pueblos y ciudades, que al no disponer de efectivo ni crédito, las posibilidades de crecimiento de muchos ayuntamientos va a resultar difícil.
Y por último, me permito la licencia de proponer una reflexión a   las partes involucradas de  la necesidad de hacer bien los “deberes”  y así, evitar equivocaciones y desatinos:
Las corporaciones municipales,  deben de tener claro lo que necesitan, quieren y como lo quieren; estudiar bien los pliegos que vayan a sacar a concurso y pongan especial interés en los controles que van a realizar para asegurar que se cumplen las condiciones mínimas pactadas. Y no olvidar la diferencia entre el sector  público y privado, donde uno de los  objetivos de la empresa privada será la rentabilidad del dinero invertido.
Las empresas,  deben de ser muy conscientes del “negocio” al que optan,   y del esfuerzo que va a requerir. Habrá  que estudiarse bien las condiciones impuestas por los ayuntamientos y no concurrir a no ser que se garantice la rentabilidad mínima del dinero invertido. Y evitar, lo que en algunas ocasiones ha ocurrido, la empresa concesionaria ha tenido que solicitar al  ayuntamiento de turno la anulación del contrato porque les estaba  suponiendo pérdidas insostenibles.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Amigo, te dire que hacer un comentario acerca de este bello ante-proyecto de crecimiento en el trabajo deportivo nivel dos, es de ya regalar mi trabajo, no obstante le sugiero que observe ud dentro de los deberes del ayuntamiento la existencia de algunos indicadores que forman parte de otras cosas, esas, las debatimos en y con condicion de contrato adelantandole que no es precisamente el deporte y la gestion de este, en lo que se limita el servicio que puede extenderse de mi prestacion profesional, creo que somos eso?, Saludos y exitos hermano.

José Miguel Rodríguez dijo...

Hola, estoy de acuerdo contigo en la mayoría de las cosas que expones, como que no todos los ayuntamientos pueden tener un polideportivo o una piscina cubierta cuando su población no es grande, o que se impartan deportes en el límite de la competencia desleal, en donde gimnasios privados no pueden ofrecer los mismos precios y los centros municipales se "llevan" la clientela, etc., no obstante y en mi opinión, el dinero público, en épocas de vacas flacas, está para subencionar acciones de primera necesidad (educación, sanidad, vivienda...) y no para subencionar deporte, puesto que el ejercicio físico no es de primera necesidad y además se puede realizar sin ningún tipo de coste, el que quiera puede ponerse unas zapatillas e ir a andar o correr y hacer flexiones y abdominales en el parque o en su casa. Con esto quiero decir que el deporte hay que pagarlo y no se le puede dar "gratis" a la gente, tal y como ocurre ahora en las instalaciones públicas. ¿o es lógico que 2 clases a la semana de Judo cuesten 20€ al mes, cuando en el gimnasio de al lado su coste es de 45€?